lunes, 9 de agosto de 2010

EL ADIOS PARA EL COMPAÑERO OSVALDO MANTELLO

 


Che muchachos,  vamos a poder despedir al cumpa Osvaldo Mantello. Esta es la invitación que le llegó al Comando Megafón:

Osvaldo, después de 33 años podemos despedirte: al querido papá, al querido compañero, al querido amigo.
La lucha de todos sirvió para recuperarte y tenerte junto a nosotros.
Los familiares y amigos invitamos a despedir a Osvaldo Víctor Mantello, secuestrado el 16 e junio de 1977, llevado al campo de concentración "El Vesubio" y posteriormente desaparecido.
Sus restos fueron restituidos por el Equipo Argentino de Antropología Forense en 2009.

La ceremonia se realizará el 11 de agosto a partir de las 16:00 en UTE, sede de la Unión de Trabajadores de la Educación, Bartolomé Mitre 1984, Ciudad de Buenos Aires.

 La siguiente es parte de la historia de Osvaldo, que también es la historia de Susy su compañera y de Juan Pablo, su hijo:

Después de 32 años su cuerpo fue encontrado en el cementerio de Avellaneda, Provincia de Buenos Aires. Osvaldo, a través de su cuerpo, le contó al Equipo Argentino de Antropología Forense que había sido fusilado y enterrado. Tenía 27 años.

Esto nos cuenta Juan Pablo Mantello su hijo:
Osvaldo había nacido el 8 de mayo de 1950, en el Partido de San Martín. Una vez terminados sus estudios comenzó su militancia Peronista. Cuando tenía 24 años conoció en una unidad básica a María Susana Reyes,  una joven de 17 años, que sería su compañera y con quien luego decidirían tenerme.
La alegría no duró mucho, ya que tres años después tanto Osvaldo como Susana y Liliana Bietti, una amiga recién llegada de Brasil, fueron secuestrados y llevados al Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio denominado “El Vesubio”. Liliana continúa desaparecida hasta la actualidad, mi papá permaneció detenido alrededor de un mes.
Según una carta que nos dejó, le decía a mi mamá, que sería “trasladado” a disposición del Poder Ejecutivo, pero esto nunca ocurrió. También decía que si yo nacía mujer me pusiera solamente María…Mi mamá fue liberada tres meses más tarde y al poco tiempo nací yo.
Ahora sus asesinos son juzgados en la causa del Vesubio en la que presta testimonio su compañera Susy Reyes.
Chau cumpas, nos vemos en la despedida de Osvaldo.
Viva Perón, Carajo!!!